A los maestros campesinos se los conoce como “yachachiq”, en lengua quechua y ellos se comparten sus altos conocimientos con las familias usuarias del proyecto Haku Wiñay ejecutado en las comunidades rurales de la sierra peruana.
El Fondo de Cooperación para el Desarrollo Social (Foncodes) y el Sistema Nacional de Evaluación, Acreditación y Certificación de la Calidad Educativa (Sineace) certificaron 118 maestros que comparten sus experiencias con los mismos agricultores.
El documento acredita que los yachachiq están calificados para transmitir sus conocimientos “de campesino a campesino” y mejorar la calidad de vida de las personas que se encuentran en condición de pobreza y pobreza extrema, respetando su cultura, tradición y con enfoque de género.
A la fecha, Foncodes ha contado con más de 13,000 yachachiq a nivel nacional, quienes han contribuido con la atención de 334,550 hogares y han impulsado a 13,773 emprendimientos rurales inclusivos.
La asistencia técnica brindada por los yachachiq es adaptada a las características productivas, técnicas, culturales y ambientales de las familias, introduciendo cambios fácilmente adaptables a su realidad, sin uso de pesticidas ni agroquímicos, mejorando su producción, productividad y calidad de sus productos agropecuarios.
De esta forma, se diversifica la disponibilidad de alimentos para su autoconsumo, y la venta de los excedentes en los mercados locales o ampliados; mejorando sus ingresos que impactan en la mejora de su calidad de vida.
La certificación se realizó en la sede de Lima y en simultáneo en las unidades territoriales de Foncodes en Abancay, Arequipa, Cajamarca, Cerro de Pasco, Chachapoyas, Chiclayo, Chimbote, Cusco, Huancavelica, Huancayo, Huánuco, Huaraz, Ica, Lima, Piura, Puno y Trujillo.
(AGRONOTICIAS – PERÚ)
